Construcción de un teléfono casero

Lata-fónica

Material

Dos latas
Pabilo o manila
un clavo
Tijeras

Procedimiento:
Cogemos dos latas de refrescos y quitamos totalmente la base superior, las cubrimos con cinta adhesiva para evitar herirnos. 

Practicamos un pequeño orificio en el centro de la base inferior a cada una con un clavo y un martillo. 

Podemos recortar una tira de papel para decorar.

Pasamos un extremo del hilo y le hacemos un nudo al final. 
Tiramos firmemente del pavilo hasta que los nudos queden tocando la base de las latas por dentro. Conectamos el otro extremo a la otra lata

Nos separamos lo suficiente hasta tensar el hilo entre las latas.

Ahora podemos hablar con la otra persona, para ello nos colocamos la lata en la boca y la otra persona la lata en la oreja.

¿que sucede?

Podemos comunicarnos a cierta distancia con otra persona

¿Qué está pasando?
Las vibraciones de la voz viaja a través de hilo el hilo. La lata actúa de caja de resonancia, amplia el sonido.

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Teléfono casero

¿Qué queremos hacer?

Construir un teléfono y realizar pruebas hasta mejorar la transmisión del sonido.

Material

- 2 vasos de plástico duro o rígido

- Aguja

- cuerda fina

- dos palillos

Procedimiento

Realizamos un agujero en el fondo de cada vaso con la ayuda de una aguja caliente.

Pasamos un cordel o cuerda fina a través de cada uno de los orificios y hacemos un nudo (podemos incluir en el nudo un pedazo de palillo) .

Tensamos la cuerda y comenzamos a hablar acercando el vaso a la boca, mientras un compañero acerca el otro envase a su oreja.

        

¿Qué  sucede?

Nuestra voz produce un sonido que se propaga por el aire en forma de onda sonora. Cuando esta onda sonora choca contra un material elástico y rígido, como el fondo del vaso, y le transmite sus vibraciones, este, a su vez, le transmite a la cuerda (medio material) y a través de ella alcanzan el otro vaso, donde el proceso se invierte; es decir, la cuerda transmite las vibraciones al fondo del vaso y éste al aire, que propaga el sonido hasta el oído de nuestro interlocutor.

 

Modificamos nuestro experimento para conseguir mejorarlo

en lugar de la cuerda usaremos otros mateirales: lana, cables de cobre, nylon, goma elástica...

En lugar de esos vasos usaremos otros vasos de tamaño, formas, rigidez, diferentes.

Queremos investigar cómo mejorar este sencillo sistema de comunicación. Para ello, vamos a trazar un plan detallado que se base en las siguientes cuestiones:

¿Qué clase de material transmite mejor?
- cordel: transmite muy bien el sonido.
- cable transmite el sonido, pero no tan bien como el cordel.
- nylon: no transmite nada el sonido.
- gomas elásticas: transmiten mal el sonido, lo amortiguan.


¿Cómo afecta el grosor de la cuerda a la transmisión del sonido? Se transmite mejor si la cuerda es más fina.

¿Cómo influye la longitud de la cuerda en la calidad de la comunicación?
El sonido es mucho más claro si se utiliza una cuerda corta, en el caso de que se utilizara una cuerda más larga, el sonido es más impreciso y se entiende con mayor dificultad.

¿Es mejor usar vasos de plástico rígido o vasos de plástico blando?
Los resultados muestran que es mejor, y más aconsejable, utilizar vasos de plástico duro, rígido.

¿Cómo influye la forma de los vasos? ¿Cuál es la forma óptima?
Probamos con con distintos tipos de vasos: conos, vasos cúbicos, de cartulina, etc.
El que nos dio mejor resultado fue el que tiene el fondo más estrecho que la parte superior.
Era el único vaso que hacía que el sonido se escuchara con mayor intensidad, esto se debe a que, gracias al estrechamiento que tiene, al actuar como un pequeño “altavoz”, amplia el sonido, de manera que se entienda con mayor intensidad.

Echándole imaginación

Además de la información recogida en los apartados anteriores, podemos hacer muchas otras actividades con los vasos comunicantes:

Por ejemplo,  conectar más vasos, si cruzamos varios hilos de más de un par de vasos el sonido vibra en más direcciones y, aunque un poco difuso el sonido se oye en más puntos.

También podemos emplear distintos tipos de vasos para comprobar su sonoridad,  vasos de yogur, de Actimel y otros…  Probar nuevas maneras de emplear el teléfono de vasos, como  por ejemplo, mojar el hilo y comprobar si la sonoridad ha mejorado, empeorado o permanece igual.

Y… ¡échale imaginación a ver qué es lo que descubres tú con éste divertido experimento!


Experiencia: Construyendo un teléfono
Pensé que si para el teléfono de casa ponen cable y unos micrófonos, para mi proyecto quizás también funcionaría. Y con un cable de teléfono y unos micrófonos de dos teléfonos viejos que tenía mi padre y después de algunos intentos funcionó. 
Comprobé que la voz se transmitía de un teléfono a otro a través del cable.

Material  2 micrófonos de teléfono cable de dos hilos  destornillador  Procedimiento Cada micrófono tiene dos bornes. Basta con unir los extremos del cable a cada uno de los micrófonos, tal como se ve en el dibujo.  Ahora sólo hay que hablar por uno y escuchar por el otro. No hace falta utilizar baterías.

Experiencia: Construcción de un teléfono


Vamos a ver cómo podemos construir un teléfono casero con pajitas y dos botellas de plástico.
Material 
- pajitas
- 2 botellas de agua mineral 
- taladro
Procedimiento

Basta con cortar dos botellas de agua, más o menos, por la mitad y taladrar los tapones para que ajusten las pajitas. A continuación unimos las dos botellas con pajitas que encajan en el tapón de cada una. Cuantas más pajitas empalmemos más lejos llegará nuestro teléfono

Cuando una persona habla por una de las botellas, otra le podrá oir desde la otra.


¿Cómo funciona el teléfono?
El fundamento es muy sencillo. Las botellas de plástico actúan como cajas de resonancia que, en cierto modo, amplifican el sonido. 
Las pajitas sirven para transmitir la vibración del aire que produce el sonido. 
En una se produce la vibración, al hablar, y las pajitas la transmiten hasta la otra. 
En la botella que sirve de auricular, se produce una amplificación y podemos escuchar los mensajes que provienen de la otra. 


Teléfono rudimientario
Materiales

• Dos latas de conserva vacías y limpias
• Una bolsa de plástico o un trozo de plástico
• Tres metros de hilo fino
• Una aguja
• Cinta adhesiva
• Un trozo de cuerda o gomas elásticas
• Un abrelatas

T

Procedimiento Pídele a tu profesor(a) o a tus padres que quiten el fondo (y la tapa, si aún la tienen) a las latas con el abrelatas. Corta el plástico y tapa con él uno de los fondos abiertos de la lata, formando una membrana; debe quedar bien estirado. Sujétalo con cinta adhesiva, cuerda o con una goma (figura 1) Une las dos latas, pasando el hilo a través del plástico. Una vez unidos, haz un nudo a cada extremo del hilo ¡Así es como tiene que quedarte! (figura 2). Y a tienes listo tu propio teléfono. Si quieres comunicarte con un amigo o amiga, tomad cada uno una lata y dejad el hilo muy tenso (¡cuidado, no se vaya a romper!) Dile a tu amigo que hable dentro de su lata, mientras tú pones tu oreja dentro del tuyo. ¿Qué tal? ).