Páginas

miércoles, 27 de abril de 2011

Algunos remedios de limpieza y ciencia




1º Remedio ¿Cómo evitar la oxidación de metales?
Material: objeto metálico y aceite
Procedimiento: Para evitar que las paellas y otros objetos se oxiden los cubriremos con aceite.
Explicación: Aisla el metal del agente oxidante, el oxígeno del aire.

2º Remedio: Limpiar productos de objetos de plata.
Material: palangana, agua caliente, sal papel de aluminio, y objetos de plata (ej cubiertos)
Procedimiento: En una palangana ponemos agua con sal y papel de aluminio, dejamos los objetos de plata sobre el papel y sumergidos en la disolución. Sacamos el objeto y lo frotamos con papel
Explicación:   Reacciones:
                       Al (sólido)               ----- Al 3*  +3e-                y
                       Ag2S (sólido) +2e-  ----- 2  Ag (sólido) + S 2-


3º Remedio: Limpieza de placas de cocina
Material: Agua caliente, levadura.
Procedimiento: En agua caliente echamos dos cucharadas de levadura y frotamos la placa.
Explicación: Fermentaciones de restos orgánicos.

4º Remedio: Eliminación de las incunstraciones de cal de grifos, ducha, plancha, etc.
Material: Vinagre, plancha, grifos
Procedimiento: Untamos un algodón con vinagre y lo aplicamos sobre la plancha, grifo o fregadero (también se puede pulverizar o sumergir el objeto si es pequeño). Después se frota y se enjuaga con agua.
Explicación: Reacción ácido-base.·El vinagre (ácido) reacciona con el carbonato de calcio (cal).

5º Limpiar o desatascar cañerías.
Material: bases fuertes, agua caliente
Procedimiento: por ser peligroso no lo haremos.Echamos medio vaso de escamas de sosa Na OH en la cañería y a continuación 2 litros de agua muy caliente.
Explicación: Las bases fuertes como KOH (potasa) y NaOH (sosa) son capaces de disolver los tejidos y restos orgánicos que han tapado alguna cañería.


6º Remedio: Quitar manchas recientes con espuma de afeitar.
Material: Prenda con una mancha reciente y espuma de afeitar
Procedimiento: Echamos espuma de afeitar sobre la mancha
Explicación: La  espuma  es  un tensioactivo (jabón).

7º Remedio: Eliminar manchas de café.
Material: Prenda con una mancha de café, alcohol, zumo de limón, agua, amoniaco.
Procedimiento: Mezclamos alcohol y zumo de limón al 50% añadimos unas gotas de agua y amoniaco. Frotamos la prenda con una esponjita. La dejamos secar y luego la lavamos.
Explicación: El alcohol como disolvente, los  citratos  del  limón  y  el amoniaco  son  buenos agentes tensioactivos.


El rincón de la ciencia propone algunos más:


La mancha de grasa se puede eliminar con gasolina.

Tanto la grasa como la gasolina son sustancias de carácter apolar, lo que significa que la  gasolina es capaz de disolver (proceso físico) la grasa. Sin embargo, la prenda quedará impregnada de un olor desagradable, que no desaparecerá al lavarla. Esto se debe a que el agua (sustancia polar) no es miscible con la gasolina y por lo tanto no es capaz de "arrastrarla". Por ello, una vez eliminada la mancha se tratará la prenda con diclorometano y posteriormente con etanol. Ahora tras el lavado la prenda ha perdido ese olor.


La mancha de vino tinto se va con vino blanco.
La mancha de carmín con tolueno (cuidado al manipularlo ya que es tóxico).
La cera de vela planchando la tela colocada entre dos papeles secantes.
La mancha de hierba, el denominado verdín, se elimina con alcohol etílico.
La mancha de esmalte de uñas con acetona.
El pegamento de barra con glicerina o etanol.
El chicle con insecticida o introduciéndolo en el frigorífico hasta que solidifique lo que permite posteriormente arrancarlo sin dejar rastro.
La mancha de aceite, en el momento, con polvos de talco.
La mancha de sangre reciente con agua fría; ¡cuidado¡ el agua caliente la fija. Si es más antigua se añadirá sobre la misma agua oxigenada poco concentrada.
La mancha de tinta de bolígrafo con etanol. Con las tintas hay que ser muy cautos; ya que algunas salen con leche como por ejemplo las de plumas estilográficas, mientras que otras no desaparecen ni con acetona.

La mayoría de estos procesos son de tipo físico (cambios de estado o disoluciones), que siempre serán preferibles a los químicos; ya que son menos abrasivos.
No todas las telas y tintes soportan los mismos tratamientos; por lo que se debe probar en una esquina o zona no visible de la prenda antes de realizar el proceso.