![lampara_lava_1 lampara_lava_1](http://www.proyectoazul.com/wp-content/uploads/2009/01/lampara_lava_1.jpg)
A veces jugar con la comida es divertido y podemos aprender sobre cómo se comportan algunos elementos cuando los mezclamos.
Nota: siempre debes consultar con un adulto antes de mezclar productos, especialmente de limpieza, algunas de estas mezclas pueden ser muy peligrosas.
Materiales:
- Un frasco
- Aceite de cocina
- Agua
- Sal
- Colorante vegetal
- Miel de abeja (opcional)
Sirve unos dos o 3 centímetros de agua en el frasco.
Agrega la misma cantidad de aceite vegetal.
Coloca 2 gotas de colorante vegetal sobre el aceite.
![lampara_lava_2 lampara_lava_2](http://www.proyectoazul.com/wp-content/uploads/2009/01/lampara_lava_2.jpg)
En este momento podemos ver como el agua y el aceite se separan y el agua queda en el fondo, mientras el aceite flota sobre él. El agua es más densa que el aceite (más pesada) y por esa razón se va al fondo. Además el agua y el aceite no se mezclan.
También puedes ver que las gotas de colorante quedaron atrapadas en el aceite.
![lampara_lava_3 lampara_lava_3](http://www.proyectoazul.com/wp-content/uploads/2009/01/lampara_lava_3.jpg)
Ahora riega un poco de sal sobre el aceite. Qué sucede?
La sal es más pesada que el aceite así que comienza a hundirse llevándose una burbuja de aceite consigo y rompe la barrera entre el agua y el aceite, en este momento el colorante comienza a mezclarse con el agua.
![lampara_lava_4 lampara_lava_4](http://www.proyectoazul.com/wp-content/uploads/2009/01/lampara_lava_4.jpg)
La burbuja de aceite queda atrapada bajo el peso de la sal en el fondo del frasco, pero lentamente la sal se disuelve en el agua y suelta la burbuja de aceite que sube hacia la superficie.
Cada vez que agregues sal, va a suceder lo mismo, el aceite baja con la sal y cuando ésta lo suelta, vuelve a subir, dando un efecto como de lámpara de lava.
![lampara_lava_5 lampara_lava_5](http://www.proyectoazul.com/wp-content/uploads/2009/01/lampara_lava_5.jpg)
Variación:
Agrega un poco de miel de abeja y deja que se asiente en el fondo. La miel es más densa que el agua y el aceite, y tampoco se mezclará con ellos.
Cuando pongas nuevamente la sal, verás que las burbujas de aceite salen más lentamente porque la sal se pega a la miel y se diluye más despacio.