Material
- una copa alta,
- un plato,
- un vasito de sangre fresca,
- agua oxigenada y
- una pastilla de jabón.
Procedimiento
Primero llenamos la mitad de la copa con agua oxigenada y la dejamos en el plato.
Luego rallamos un poco de jabón con un cuchillo y lo ponemos en la copa con el agua oxigenada. Finalmente añadimos la sangre.
Vemos que se produce una espuma blanca que desborda la copa.
Explicación.La sangre y el agua oxigenada producen una reacción química con liberación de oxígeno gaseoso que forma la espuma. Al añadir un poco de jabón se logra una cantidad de espuma mucho mayor.