viernes, 15 de abril de 2011

Persistencia de la visión

Experiencia propuesta por "exploratorium"

Material
- Tubo de embalaje de 8 cm de diámetro y entre 60-90 cm de longitud.
- Tapa del tubo
- Cúter o cuchillo
Procedimiento
Con un cúter o cuchillo hacemos una rendija rectangular en la tapa de 0,3-0,5 cm x 3 cm más o menos.
Cerramos un ojo. Ponemos el otro ojo en el extremo abierto del tubo, lo sujetamos de modo que la ranura quede vertical. (Ponemos una mano entre el ojo y el tubo a modo de almohadilla para no hacernos daño).
Miramos al frente a través del tubo y apenas vemos nada.
Nos mantenemos inmóviles y movemos el fondo del tubo a uno y  otro lado (movimiento de vaivén), a diferentes velocidades, hasta que podamos percibir claramente.
¿Qué sucede?
Cuando el tubo está parado, no se puede ver mucho,  pero al aumentar la velocidad podemos tener una visión bastante clara de nuestro entorno
Explicación
Nuestro cerebro retiene una impresión visual de 1/30 de segundo. El tiempo exacto depende del brillo de la imagen). Esta capacidad, se llama persistencia de la visión.
Al desplazar el tubo de lado a lado, al ojo se le presenta una sucesión de imágenes estrechas, y al mover el tubo lo suficientemente rápido, nuestro cerebro retiene las imágenes lo bastante para construir una imagen completa de su entorno.
Es lo que sucede con las peliculas, éstas son una sucesión de fotogramas, el ojo retiene la imagen de cada fotograma el tiempo suficiente para darnos la imagen de continuidad.